Para el mayagüezano Roberto Ramos Perea la Medalla Alegría

Roberto Ramos PereaRecibir la medalla de la Fundación Alegría en reconocimiento a su patriótica labor en defensa, conservación, fomento y divulgación de la cultura e identidad nacional, y en particular por su labor en el desarrollo y enriquecimiento de las artes teatrales supone para el dramaturgo mayagüezano Roberto Ramos Perea “la sincera confirmación de que algo he hecho que ha salido bien y que es reconocido por los que saben más que yo”.

Ramos Perea es dramaturgo, actor, director de escena, periodista, investigador y crítico teatral y con la medalla de la Fundación Alegría, añade su nombre al de otros destacados puertorriqueños que también han recibido el galardón, entre otros, el Dr. Marcelino Canino, el Dr. Osiris Delgado, el Lcdo. Juan Mari Brás, la historiadora Marisa Rosado, el Dr. Teodoro Vidal y el Lcdo. Willie Miranda Marín.

Roberto Ramos Perea“Este es de esos honores que uno no espera y de pronto te los dan y tienen una carga de cosa mística que deslumbra. Bueno, mística para mí, vamos, que estar en la misma liga de un Juan Mari, de un Marcelino Canino (que es el hombre más inteligente que tiene Puerto Rico en este momento), de un artista y crítico como lo es Don Osiris, amigo de muchos años, de ese patriota que es Willie Miranda Marín, que aunque popular, es libertario y soberano como buen puertorriqueño primero, Don Teodoro Vidal, óyeme, que ese artista es el alma de nuestro folclore... y que venga de la mano de un Comandante de la Revolución Cultural como lo es Ricardo... que es el más aguerrido defensor de nuestra cultural, el hombre que dio armas y fuerza a la lucha pro la identidad en el siglo XX, que sin él mucho de lo que somos se hubiera perdido en la americanización voraz que nos consume... es la sincera confirmación de que algo he hecho que ha salido bien y que es reconocido por los que saben más que yo. Me siento sumamente complacido aunque insisto que es inmerecido. Pero lo recibo con mi corazón en gozo”, dijo Ramos Perea a mayaguezsabeamango.com.

La Fundación Alegría es una sociedad sin fines de lucro, organizada y dotada por su fundador, el historiador y arqueólogo, Dr. Ricardo E. Alegría, uno de los grandes responsables de la conservación del patrimonio cultural puertorriqueño y fundador del Instituto de Cultura Puertorriqueña en la década del 50. Desde al misma Don Ricardo reconoce el valor de quienes han hecho una contribución notable en la defensa, conservación, divulgación y en el fomento de las diversas manifestaciones de la cultura nacional de Puerto Rico.

Ramos Perea, también director ejecutivo del Ateneo Puertorriqueño -la institución cultural más antigua del país- recibe el reconocimiento en momentos en que ha sido despedido de su espacio en una importante estación radial de la capital en la que en su función de analista pasaba juicio crítico sobre los acontecimientos políticos y culturales del país.

“Al otro día de anunciarse, mi lista de enemigos se me debe haber multiplicado. En nuestra amada Patria la estupidez no tiene horizonte! Y en esa estupidez se niega e invalida lo que somos. Los que trataron de callarme, sobretodo en los medios de comunicación radiales donde yo emitía opiniones, se han dado cuenta de que el pueblo admira la franqueza y la firmeza de principios. El apoyo recibido tras mi censura sobrepasa por muchísimo el apoyo a las opiniones vendidas de los que fueron mis colegas analistas. El pueblo es indiferente al que se vende. Y yo lo digo y lo repito, en este país el 99 por ciento de los medios de comunicación masiva están comprados por el gobierno de Luís Fortuño. Eso es real. Y que venga un anarquista, ateo, socialista, peludo, dramaturgo ¡que nunca me pondré una maldita corbata para disfrazar mi corazón! y encima mayagüezano de raíz en sangre, a decirles en la cara lo vendidos que son, y que esa franqueza sea celebrada y reconocida por las cabezas más iluminadas de nuestro país, pues si, hermanita, les tiene que doler”, sentenció.

Roberto Ramos Perea¿Eres el segundo mayagüezano a quien le dan el reconocimiento, significa algo particular?

“Para nada, Juan Mari Brás es un ídolo, un icono, un ejemplo un alma de lucha y entrega a lo que esta Patria es. Mayagüez le debe muchos más reconocimientos de los que le ha dado. Pero en este país somos avaros hasta para el elogio. Dios quiera que nunca, como mayagüezanos, caigamos en la barata trampa de los colores y las banderas a la hora de honrar a los que tan grande honor merecen”.

Roberto Ramos Perea nació en Mayagüez, el 13 de agosto de 1957. Estudió dramaturgia y actuación en el Instituto Nacional de Bellas Artes de México y drama y estudios hispánicos en la Universidad de Puerto Rico. Ha ejercido de periodista en los diarios El Reportero, El Vocero y El Mundo y crítico de teatro de la revista VEA.

El galardón de Alegría, otorgado en una reunión privada en la residencia de Don Ricardo en el Viejo San Juan el 13 del corriente, aumenta los reconocimientos que ha acumulado el mayagüezano a lo largo de su carrera profesional de Casa de las Américas en Cuba, dos premios del Ateneo Puertorriqueño, del Dúo Theatre de Nueva York, del Pen Club, el Tirso de Molina de España, del Círculo de Críticos de Teatro de Puerto Rico, y otros del Instituto de Literatura Puertorriqueña, así como el Premio Nacional de Periodismo, Bolívar Pagán.

¿Cual es su valor en este momento?

“Mucho. Llega en un momento en que estoy sangrando en trincheras de lucha y llega en el dulce espacio de la pasión creativa. Los artistas necesitamos espacios de paz y de fogosidad en la creación, tu lo sabes que eres una artista de primer orden. Paz y pasión, y sobre ella, el reconocimiento de los pares hace que por un momento de pausa, ¡todo tenga sentido! ¡Estamos tan enfangados de decepciones! Es tanto el tiempo que se pierde en minucias y en mezquindades, que un abrazo, una sonrisa fraternal, un poco de agua fresca, una fruta limpia que estalla en tu boca, hace que la vida sea también muy limpia de pronto... imagínate cómo sentirse cuando ese hombre a sus 91 años, sólido como una montaña, ¡más lúcido que yo mismo!, me abraza con sus añosas manos de hombre de bien y me dice que tengo el deber de continuar lo que él ha hecho. Yo, con otros tantos, por supuesto... pero continuar una obra como la de Don Ricardo es una batalla épica de vida. Tal es este significado, que me ha dejado como una promesa a un niño”.

¿Piensas volver a la radio para retomar la tarea inconclusa?

Roberto Ramos Perea“Te voy a decir algo que he dicho a poca gente. Algunos amigos trataron de llevarme a otra estación muy importante. Y las palabras del que manda fueron muy elogiosas para mí. Se me elogió mi franqueza, mi inteligencia, mi fogosidad, mi valentía... pero luego de eso, esa misma persona dijo que esas virtudes mías que él me adjudicaba ¡"eran malas para el negocio"! La radio es un negocio donde mi franqueza mayagüezana no cabe. Será porque creo que el respeto hay que ganárselo. Que no tengo por qué respetar a un gobierno que no respeta a su pueblo, ni a funcionarios que odian a su país porque se odian demasiado a si mismos y a su identidad. Siempre he sabido que los escenarios y los libros y el cine, hablan más duro que los tiros, y quizá que la radio misma, por eso me quedo en ellos. Que fue una buena oportunidad, excelente. Pero WKAQ está vendida a los intereses de la vía verde y del gobierno de turno y por eso me despidieron. Porque nadie con sentido común, puede ponerle precio a su verdad.

La obra de Ramos Perea, Rector del Conservatorio de Arte Dramático del Ateneo Puertorriqueño y fundador de su Archivo Nacional de Teatro y Cine, ha sido traducida al inglés y japonés. Ramos Perea ha hecho adaptaciones y versiones de una veintena de obras de otros autores nacionales e internacionales.

¡Enhorabuena!